Tío tío, creo que hay un monstruo en tu cocina

Bienvenidos a un nuevo capítulo de "la ciencia al servicio de la estupidez". La frase que da título a la entrada la dijo un colega hace unos cuantos años cuando se encontraba en casa de un amigo suyo y éste, al parecer, se dejó en el microondas un bote de Nocilla con unos pequeños rebordes de aluminio, produciendo pequeños rayos azules dentro del microondas y una sensación de "el aire parece raro".

Ostia tío, un monstruo en tu cocina!!

Todos sabemos que no es conveniente meter cosas metálicas en el microondas ni vajilla con pintura azul, en el primero de los casos porque los metales reflejan las microondas y las devuelven al magnetrón (no amigos pastilleros, esto no es lo mismo que el megatrón) haciendo que este casque y deje de funcionar, y en el segundo caso porque para conseguir el color azul de los adornos de la vajilla se suelen usar metales (plomo) y tres cuartas partes de lo de antes.

Bueno, pues la gente parece que disfruta haciendo el subnormal, bien sea destruyendo el microondas de su casa, poniendo el subwoofer encima de la televisión o metiéndose dentro de una lavadora... pero el que más cancha da es sin duda el microondas. Como siempre os digo: NO HAGÁIS ESTO EN VUESTRA CASA (pero en casa de otras personas sí, que se jodan)

En primer lugar vamos a ir con un video-resumen de cosas que no se os ocurriría meter en un microondas, pero la gente con mucho tiempo libre y poco aprecio por su vida las mete.

Bueno, lo de las uvas esta gente lo hace cutrísimo, porque bien hecho obtienes una bola de plasma que es una pasada, (más información en el tutubo frikis de mierda) lo del CD pues eso... rayitos azules producidos por la capa de aluminio en la que se sustenta el CD (completamente marica) y lo de la bombilla si que es una pasada, pero es muy peligroso, actualmente no tengo ni guarra de porqué pasa esto pero me enteraré.

El siguiente video ya es más "metafísico". Consiste en meter una "cuna de Newton" en un microondas, con erótico y explosivo resultado. (Cortesia de Brainiac, uno de mis programas favoritos)

En este caso metemos el artilugio "funcionando" dentro del microondas y la gracia se encuentra en que las bolas se magnetizan y adquieren todas la misma cantidad de energía, oscilando todas juntitas y en compañía. Como añadido destructivo, las bolas (que son metálicas) devuelven al magnetrón las microondas pero en frecuencia resonante (ya hablaremos de la resonancia en el futuro porque es brutal) y le meten tal cantidad de carga energética que al final acaba reventando.

Bueno amiguitos de la ciencia destructiva, espero que ésto os haya ilustrado y no utilicéis el microondas para hacer el falto o meter penes de plástico. Utilizadlo para cosas útiles, como en este video:

Muerte al invasor!! y si es de forma divertida.... mejor!!!

Que os la pique un pollo!! (o dos, si son pequeños)